Una Infancia En Montreal

Una infancia en Montreal es una autobiograf a de Eric Berne descubierta recientemente por su hijo Terry. Trata de su infancia y juventud en Montreal y ofrece un retrato afectuoso y revelador de la comunidad de inmigrantes que viv an en la calle Ste. Famille.

Incluye pr logo y ep logo de Terry Berne y el discurso que ste ofreci en el congreso de Montreal de 2010. Tambi n, un peque o postscriptum de Claude Steiner y un album fotogr fico que ilustre a las personas e historias que en el libro se narran. Las im genes humor sticas y evocadoras de las muchas diferencias culturales que reinaban por entonces en Montreal est n entre los pasajes m s memorables del libro, como lo son las an cdotas que recogen c mo los ni os de la calle Ste. Famille aprend an a arregl rselas, a menudo de manera dolorosa, con estas diferencias.

Terry Berne Que Eric estaba escribiendo una autobiograf a unos pocos a os antes de su muerte en 1970 era desconocido por nosotros en el Seminario de San Francisco. Es uno de los muchos hechos ocultos que la Gran Pir mide (como l mismo se denomin en un cr ptico graffiti que realiz en una pared de mi casa el d a de su 60 cumplea os) manten a bajo llave en una c mara oculta que met dicamente ha desenterrado Terry en los ltimos a os.

Claude Steiner As que ah estaba yo, un descendiente directo de Ad n y Eva, afrontando el mundo a mis diecisiete. Ten a pocas cosas materiales y nada de dinero en mis bolsillos, pero ten a un mont n de parientes, una carta de admisi n para una universidad, un trabajo y una novia. Las cosas m s importantes que pose a estaban en mi cabeza. En primer lugar, todas las cosas que hab an puesto ah mis padres, mis profesores, los libros y mis amistades: ocupaciones y libertades, aspiraciones y prohibiciones. En segundo lugar, todo el conocimiento del mundo y sus aspectos, y de las cosas que ten a para ofrecerme y que pod a tomar. En tercer lugar, todos los recuerdos y deseos que hab an crecido conmigo desde mi nacimiento, todos los ideales y esperanzas y esfuerzos y creaciones que brotaban de mi joven alma. As que pod a ir por las calles con la cabeza alta, balanceando mis brazos con firmeza como un s bdito brit nico libre, y sentirme a m mismo como una parte del mundo, con todos sus rboles y p jaros y bestias y gentes que lat an y pululaban por la tierra y por encima de ella, y s , tambi n de las ra ces que rebuscaban debajo de su superficie.

Eric Berne