Las amantes de Eolo

Eolo, Dios del Viento griego, cansado de la eternidad, se transforma en un chaval de diecisiete, dieciocho y diecinueve a os a finales de los a os 70 y principios de los 80. Con su enorme nabo de treinta cent metros viaja con una desvencijada mochila y una tienda de campa a hecha harapos de tanto parche, y les aparece a las jovencitas como un chico huido de su casa.En su largo deambular recorre toda la costa mediterr nea, desde la Costa del Sol malague a hasta las playas para so de Ibiza y tras hu r de la isla recorrer la costa valenciana y catalana hasta la ribera del Ebro y m s all juntando lechos y amores huidizos. Y tras su largu simo deambular acaba enamorado de una mujer mucho m s mayor que conoci en un bar restaurante en Nerja y decide quedarse a vivir con ella en su cortijo sobre los acantilados de Maro. Relato trepidante y sexo m gico lesbianismo y tr o por un tubo.