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Beskrivelse
A comienzos del siglo XXI, tras la toma de posici n inicial de Mart n Lutero, fueron muchos los centroeuropeos que decidieron que la iglesia cristiana, tal como se ven a gestionando desde Roma, necesitaba una honda reforma. Pero los Reformadores no lo cambiaron todo. Todos los cristianos europeos coincid an en que la iglesia cristiana y el estado civil deb an ir siempre unidos. As entre ambos, podr an dirigir una sociedad piadosa y cristiana donde caben todos, desde el monarca hasta el ltimo esclavo o campesino. Pero no tard en aparecer una Reforma radical, clandestina y marginada, que cuestion esta manera de entender la iglesia. Ellos entend an que en la era apost lica, s lo eran cristianos aquellos que segu an a Jes s por su propia voluntad y deseo. Le an en sus Biblias que m s que apoyos de las autoridades, aquellos primeros cristianos hab an tenido que sufrir el martirio frente a la intolerancia violenta de los poderosos. As empez una de las grandes aventuras de la espiritualidad cristiana: el empe anabaptista -conocido a la postre como menonita- por vivir una forma de cristianismo que no necesita el poder de las armas ni de las riquezas de este mundo. Una forma de cristianismo que se hace fuerte en la persecuci n y en la debilidad y en la marginaci n; que se empieza a parecer a Jes s cuando perdona a sus enemigos, adoptando -como l- formas no violentas de defender su verdad.
