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Beskrivelse
Conduc a hacia el este en Speedway Blvd., el chubasco fuerte gradualmente disminu a, y el sol se asomaba a trav s de las nubes. El sol estaba a mi derecha por la parte trasera del auto. Cuando mir hacia mi izquierda, vi el primer destello de un arco iris.tuvieron xito, y mi padre vivi una vida activa por 40 a os m s. Las historias relatadas en este libro son verdaderas, y aprecio mucho a aquellos quienes compartieron su experiencia personal con el c ncer. Hubo personas a quienes les ped que participaran al relatar su experiencia, pero escogieron no compartir su experiencia, similar a quienes se van a la guerra y regresan a casa sin querer compartir. Me encant cuando Jack me dijo, " No quiero disgustarte, pero qui n va querer leer esto?" Mi meta al exponer estas historias es darle al lector una vista interna al c ncer desde diferentes perspectivas. Ningunas dos experiencias son iguales. El tratamiento para una persona quiz no funcione para otra. Los sentimientos expresados en la historias son universales, pero ser n diferentes en intensidad. Las reacciones a esos sentimientos tambi n van a variar. Los diagn sticos, el tratamiento, la edad, y las circunstancias traer n diferentes resultados. Las obscuras nubes al otro lado del arco iris ya bien formado, intensificaban los colores. Las nubes eran el origen de la tormenta. Una diagnosis de c ncer crea una tormenta. No importa que tan considerado sea el m dico, al hacer la declaraci n, el individuo afectado es impactado fuertemente. Aunque el paciente parece estar escuchando, es com n que su mente se desv e y no escuche lo dem s que diga el m dico. A os atr s, el ser diagnosticado con c ncer, era una sentencia a muerte. A finales de 1940, a la edad de 30 a os, mi padre fue diagnosticado con Hodgkin's. El doctor le dijo a mi madre que se preparara para la muerte de su esposo. Sin embargo, los tratamientos de Rayo X (radiaci n) tuvieron xito, y mi padre vivi una vida activa por 40 a os m s. Las historias relatadas en este libro son verdaderas, y aprecio mucho a aquellos quienes compartieron su experiencia personal con el c ncer. Hubo personas a quienes les ped que participaran al relatar su experiencia, pero escogieron no compartir su experiencia, similar a quienes se van a la guerra y regresan a casa sin querer compartir. Me encant cuando Jack me dijo, " No quiero disgustarte, pero qui n va querer leer esto?" Mi meta al exponer estas historias es darle al lector una vista interna al c ncer desde diferentes perspectivas. Ningunas dos experiencias son iguales. El tratamiento para una persona quiz no funcione para otra. Los sentimientos expresados en la historias son universales, pero ser n diferentes en intensidad. Las reacciones a esos sentimientos tambi n van a variar. Los diagn sticos, el tratamiento, la edad, y las circunstancias traer n diferentes resultados. El leer este libro los expondr a un conocimiento de que la esperanza existe. La espiritualidad tendr su lugar al igual las creencias religiosas espec ficas de cada uno. Los colaboradores han sido diagnosticados con varias formas de c ncer; incluyendo c ncer del pulm n, c ncer de la vejiga, met tesis despu s de c ncer del seno, c ncer de la pr stata, c ncer de la lengua, y c ncer del seno de la autora. Un alto porcentaje de personas quienes han sido diagnosticadas con c ncer viven y funcionan en el mundo hoy. Margaret Phalor Barnhart Autora y Editora Cristiana