Los días de Ellwood

Poes a que ha aprendido a flotar sobre las heladas aguas del Hudson. Seducida mirada de un hombre triste hacia el abismo y los rieles brillosos como diamantes. La escritura de Manuel Adri n L pez (La poes a de Los d as de Ellwood) es el logro est tico de un flaneur de pasos dolorosos. El paseante incansable ha lanzado sus versos hacia el m s all . La direcci n sublime de estos poemas nos revela una inquietante experiencia recogida por los territorios sobrenaturales de Ellwood (Nueva York). Algo ha hecho este hombre tr pico para reunir atm sferas sobrecogedoras en esta maravillosa poes a: geishas seductoras como sirenas, t neles encantados, r os fantasmales, claustros vetustos, unicornios, tapices ensangrentados, esp ritus en la neblina. La poes a de Los d as de Ellwood ha bebido en los manantiales profundos que resabian los capitales est ticos del g tico americano. Esta propuesta l rica nos recuerda las posibilidades creativas de lo bello y de lo sublime compartiendo los escenarios ambiguos de la serenidad y de la tormenta existencial del hombre contempor neo. Oda y eleg a a Nueva York en una danza macabr de antiguos duelos tropicales. - Vladimir Guerrero- Chihuahua, Chihuahua. (14 de febrero de 2020)