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Beskrivelse
La Selva campechana por centurias ha sido proveedora de madera, poco tiempo despu s de la conquista, los barcos transportaban a Europa el palo de tinte, cedro, caoba y maderas duras tropicales en cantidades calculadas en miles de toneladas que se incrementaron paulatinamente hasta alcanzar las 100.000 toneladas en un a o. La plata corr a a raudales y se llenaron los bosques de cazadores, madereros, chicleros y tambi n de bandidos pr fugos de la justicia que se cobijaron al amparo de estas arduas profesiones, viv an en la selva a gusto porque la ley no exist a y muchas veces pod an obtener un sueldo honorable. Los lagarteros y cazadores que siempre hab an existido entre los indios y mestizos, encontraron la manera de nunca quedarse sin empleo, brincaban de una actividad a otra manteni ndose constantemente en la selva que era su h bitat. Ah , en el monte intrincado, habitualmente por las tardes antes de retirarse a descansar se contaban las m s ins litas leyendas que mezclaban las quimeras con una realidad evidente. El autor del libro en pocas m s recientes fue protagonista o participe en algunas de estas actividades y en este texto las adapt a su criterio para sacarlas a la luz.