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Beskrivelse
Parecer a, Palma, que al correr de la vida -al paso de las horas, los d as, los decenios-, tu imagen se alimenta de esa informe, esa leve y aleve materia que es el tiempo. Te veo all sentada, a n te veo, sentada casualmente, platicando sonriente con Ennio aquella tarde, en un abril remoto que casi ya no ocupa lugar en la memoria. Era la vieja Roma, eran los a os j venes -mis a os de estudiante- los cines de segunda, los sue os de primera, los amor os fugaces, los paseos nocturnos por el Pincio, las parejas de amantes a la luz de la luna. Era la poca de la guerra ominosa de Vietnam y las protestas masivas de estudiantes y obreros, eran los meses finales de mi estad a romana, Hemingway y Pavese, la tesis que escrib a sobre el primero. Era el grupo de amigos y amigas que los a os y la distancia se han tragado y era Palma Ferrante en la casa de Ennio y era la Ni a Veras -mi paisana-, que comparti conmigo lo de Palma.