Mkombo. Soba del Norte

MKOMBO. SOBA DEL NORTE Con la absurda muerte del Soba Mkemba IV, al atraves rsele la espina de un "peixe" en la garganta, la tribu de los Malengo, la m s poderosa del noroeste de Angola se ve sumergida en una cruenta y sangrienta guerra por la sucesi n. Todo lo que se opone o pueda suponer un peligro para la coronaci n del usurpador Ekeba debe ser barrido y borrado con sangre. Es as que la ex tica Mkamba, "la del cuello de jirafa," consorte principal del Soba y madre del peque o Mkombo, a todas vistas pr ncipe heredero, debe huir y refugiarse en la selva, donde es ultimada salvajemente por los feroces guerreros de la tribu. La malograda reina antes de morir logra esconder a su hijo, que salva la vida milagrosamente de sus perseguidores. Pero ahora deber enfrentar solo los m ltiples y mortales peligros que esconde la intrincada jungla de la floresta africana. Solo hay una opci n para que el peque o pr ncipe sobreviva y es la de aliarse y convivir con una manada de cercopitecos, cuya reina madre mona lo acoge maternalmente, pensando en su edad senil y en su avanzada ceguera de que se trata de uno m s de los suyos. Entre los simios, ahora sus "hermanastros," lograr sobrevivir a una muerte segura y aprender de stos, su lenguaje, sus costumbres y alimentarse como ellos, y sobre todo eludir la muerte ante sus m s feroces enemigos: las hienas, los leopardos, las guilas y sobre todo sus parientes cercanos: los chimpanc s carn voros y asesinos, que con m s inteligencia que el resto de los animales, emplea m todos de caza cooperativos y organizados con ptimos resultados para capturar y devorar a sus peque os compa eros. Contra ellos, al final tendr que combatir y crear armas para enfrentarlos y demostrarles que l es aun m s fuerte e inteligente. Pero aun queda un enemigo m s, el m s peligroso, cruel y sanguinario de todos: el ser humano, que no solo caza simios para comer, sino tambi n por placer y diversi n. Al final tambi n tendr que v rsela con los humanos, ya no entre los simios, sino defendiendo sus derechos como Soba heredero de la tribu m s grande y poderosa del noroeste y se or de las nueve tribus y sobas subordinados. Para ello contar con amigos europeos embelezados por el hechizo africano, y dispuestos a correr con l su misma suerte, tambi n con sus "hermanastros" simios con los que se comunica y lo mantienen alerta e informado de los riesgos y peligros de la selva. La b squeda desesperada y enfermiza del Soba por hallar una esposa parecida f sicamente a su madre, muerta en condiciones dram ticas durante su ni ez, lo llevar a aventurarse en las enigm ticas y desconocidas llanuras del Sur, acompa ado de algunos de sus fieles seguidores, en medio de la guerra violenta y devastadora, para al final encontrar el amor esperado, pero no con alguien cuyo fenotipo responde a la imagen de su progenitora, sino con una mujer real entre las tribus de pastores de las extensas y secas sabanas australes. Aquel viaje, a todas luces incomprensible y absurdo, tendr un alto precio para la paz y la estabilidad de la aldea, por lo que a su regreso tendr que sofocar una revuelta ambiciosa y desmedida, que lo llevar a un enfrentamiento violento con los usurpadores, y la destrucci n de gran parte de su obra de gobierno, cuidadosamente sedimentada bajo esfuerzos y sacrificios, aunque renacer en l la necesidad de empezar de nuevo, reconstruirlo todo y continuar la b squeda de un futuro mejor para su pueblo. Las aventuras de Mkombo, su odisea para sobrevivir en la jungla, ascender al poder y superar las arcaicas normas primitivas tribales de muchos siglos de existencia, con el fin de mejorar la vida de sus s bditos y llevar el progreso a su aldea, es de lo que trata la historia que abordamos. Enmarcada, adem s, en medio de una cruenta guerra civil que azota el pa s y en la frontera con el Congo, por donde penetran bandas de cazadores furtivos, de bandoleros asesino